Poemas

Soneto XXVI Ni el color de las dunas terribles en Iquique, ni el estuario del Río Dulce de Guatemala, cambiaron tu perfil conquistado en el…

Soneto XXV Antes de amarte, amor, nada era mío: vacilé por las calles y las cosas: nada contaba ni tenía nombre: el mundo era del…

Soneto XXIV Amor, amor, las nubes a la torre del cielo subieron como triunfantes lavanderas, y todo ardió en azul, todo fue estrella: el mar,…

Soneto XXIII Fue luz el fuego y pan la luna rencorosa, el jazmín duplicó su estrellado secreto, y del terrible amor las suaves manos puras…

Soneto XXII Cuántas veces, amor, te amé sin verte y tal vez sin recuerdo, sin reconocer tu mirada, sin mirarte, centaura, en regiones contrarias, en…

Soneto XXI Oh que todo el amor propague en mí su boca, que no sufra un momento más sin primavera, yo no vendí sino mis…

Soneto XX Mi fea, eres una castaña despeinada, mi bella, eres hermosa como el viento, mi fea, de tu boca se pueden hacer dos, mi…

Soneto XIX Mientras la magna espuma de Isla Negra, la sal azul, el sol en las olas te mojan, yo miro los trabajos de la…

Soneto XVIII Por las montañas vas como viene la brisa o la corriente brusca que baja de la nieve o bien tu cabellera palpitante confirma…

Soneto XVII No te amo como si fueras rosa de sal, topacio o flecha de claveles que propagan el fuego: te amo como se aman…

Soneto XVI Amo el trozo de tierra que tú eres, porque de las praderas planetarias otra estrella no tengo. Tú repites la multiplicación del universo.…

Soneto XV Desde hace mucho tiempo la tierra te conoce: eres compacta como el pan o la madera, eres cuerpo, racimo de segura sustancia, tienes…

Soneto XIV Me falta tiempo para celebrar tus cabellos. Uno por uno debo contarlos y alabarlos: otros amantes quieren vivir con ciertos ojos, yo sólo…

Soneto XIII La luz que de tus pies sube a tu cabellera, la turgencia que envuelve tu forma delicada, no es de nácar marino, nunca…

Soneto XII Plena mujer, manzana carnal, luna caliente, espeso aroma de algas, lodo y luz machacados, qué oscura claridad se abre entre tus columnas? Qué…

Soneto XI Tengo hambre de tu boca, de tu voz, de tu pelo y por las calles voy sin nutrirme, callado, no me sostiene el…

Soneto X Suave es la bella como si música y madera, ágata, telas, trigo, duraznos transparentes, hubieran erigido la fugitiva estatua. Hacia la ola dirige…

Soneto IX Al golpe de la ola contra la piedra indócil la claridad estalla y establece su rosa y el círculo del mar se reduce…

Soneto VIII Si no fuera porque tus ojos tienen color de luna, de día con arcilla, con trabajo, con fuego, y aprisionada tienes la agilidad…

Soneto VI En los bosques, perdido, corté una rama oscura y a los labios, sediento, levanté su susurro: era tal vez la voz de la…