Oda al amor - Poema de Pablo Neruda

Pablo Neruda, el renombrado poeta chileno, escribió la "Oda al amor" como parte de su extensa obra lírica. Este poema fue creado en un contexto en el que Neruda exploraba de manera apasionada y profunda los diferentes matices del amor, tanto en sus alegrías como en sus dolores. La "Oda al amor" es un canto apasionado y sincero a la fuerza transformadora y redentora del amor en la vida de las personas.

El tema central de este poema es el amor en su forma más pura y universal. A lo largo de los versos, Neruda celebra la capacidad del amor para sanar heridas, iluminar la existencia y conectarnos con lo más profundo de nuestro ser. A pesar de haber sido escrito hace décadas, el mensaje de amor y esperanza que transmite la "Oda al amor" sigue siendo relevante y conmovedor para los lectores contemporáneos.

Oda al amor

Amor, hagamos cuentas.
A mi edad
no es posible
engañar o engañarnos.
Fui ladrón de caminos,
tal vez,
no me arrepiento.
Un minuto profundo,
una magnolia rota
por mis dientes
y la luz de la luna
celestina.
Muy bien, pero, el balance?
La soledad mantuvo
su red entretejida
de fríos jazmineros
y entonces
la que llegó a mis brazos
fue la reina rosada
de las islas.
Amor,
con una gota,
aunque caiga
durante toda y toda
la nocturna
primavera
no se forma el océano
y me quedé desnudo,
solitario, esperando.

Pero, he aquí que aquella
que pasó por mis brazos
como una ola
aquella
que sólo fue un sabor
de fruta vespertina,
de pronto
parpadeó como estrella,
ardió como paloma
y la encontré en mi piel
desenlazándose
como la cabellera de una hoguera.
Amor, desde aquel día
todo fue más sencillo.
Obedecí las órdenes
que mi olvidado corazón me daba
y apreté su cintura
y reclamé su boca
con todo el poderío
de mis besos,
como un rey que arrebata
con un ejército desesperado
una pequeña torre donde crece
la azucena salvaje de su infancia.
Por eso, Amor, yo creo
que enmarañado y duro
puede ser tu camino,
pero que vuelves
de tu cacería
y cuando enciendes
otra vez el fuego,
como el pan en la mesa,
así, con sencillez,
debe estar lo que amamos.
Amor, eso me diste.
Cuando por vez primera
ella llegó a mis brazos
pasó como las aguas
en una despeñada primavera.
Hoy
la recojo.
Son angostas mis manos pequeñas
las cuencas de mis ojos
para que ellas reciban
su tesoro,
la cascada
de interminable luz, el hilo de oro,
el pan de su fragancia
que son sencillamente, Amor, mi vida.

En el poema, Neruda logra comunicar la esencia del amor de una manera accesible y conmovedora. A través de imágenes poéticas y una prosa exquisita, invita al lector a reflexionar sobre la importancia de amar y ser amado en un mundo lleno de desafíos y contradicciones. La "Oda al amor" toca temas universales como la pasión, la entrega y la conexión humana, lo que la convierte en un poema que resuena tanto a nivel personal como colectivo.

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